EL RHEMA DEL DÍA 12 de agosto de 2011:
(RVA)
Rom 8:15
Pues no recibisteis el espíritu de esclavitud para estar otra vez bajo el temor, sino que recibisteis el espíritu de adopción como hijos, en el cual clamamos: "¡Abba, Padre!"
La adopción es la nueva relación que tenemos los cristianos con Dios. Pablo nos enseña esta verdad tal como lo era en la época de los romanos.
Por la adopción, una persona pasaba a estar bajo una nueva patria potestad, adquiriendo todos los derechos de un hijo legítimo de la nueva familia. Tenía legalmente un nuevo padre y automáticamente quedaba constituido heredero.
Para la ley, la vida anterior de la persona adoptada se borraba completamente. Por ejemplo: si tenía deudas, quedaban canceladas. Es así que el adoptado era considerado una nueva persona que empezaba una vida nueva sin la menor vinculación con el pasado. Para la ley romana era hijo de su nuevo padre en todos los sentidos.
Lo mismo nos ocurre a nosotros. Sin merecerlo, Dios nos tomó como hijos, perdonó nuestras deudas y nos hizo herederos de la gloria.
El mismo versículo en otras versiones de la Biblia:
(JER3) Y vosotros no habéis recibido un espíritu de esclavos para recaer en el temor; antes bien, habéis recibido un espíritu de hijos adoptivos que nos hace exclamar: ¡Abbá, Padre!
(BL95) Entonces no vuelvan al miedo; ustedes no recibieron un espíritu de esclavos, sino el espíritu propio de los hijos, que nos permite gritar: ¡Abba!, o sea: ¡Papá!"
(BPD) Y ustedes no han recibido un espíritu de esclavos para volver a caer en el temor, sino el espíritu de hijos adoptivos, que nos hace llamar a Dios: ¡Abba!, es decir, ¡Padre!
DICCIONARIO STRONG:
Adopción: Número de referencia G5206. En el original, se escribe υἱοθεσία. Juiodsesía: de un presunto compuesto de G5207 y un derivado de G5087; colocar como hijo, i.e. adopción (figurativamente cristiana calidad de hijo respecto a Dios):- adopción de hijo, adoptar.
Pastor Mario Néstor Fleita
