miércoles, 27 de febrero de 2013

PRINCIPIOS DE LA GENEROSIDAD



2 Corintios 9: 7

Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría.

Con el que es tacaño a la hora de sembrar también la tierra es tacaña a la hora de producir.

Pero, la cosecha es generosa con el que es generoso en la siembra.

Que cada cual aporte lo que haya decidido de corazón; no como si le doliera el dar o como si se le obligara a hacerlo, porque es el dador alegre el que Le encanta al Señor.

Como está escrito:
«Lanzó su semilla;
dio de comer a los pobres;
su integridad es inalterable.»

Así serán enriquecidos en todos los sentidos para que puedan seguir siendo generosos en todo con esa generosidad que, por medio de ustedes, produce una cosecha abundante de acciones de gracias a Dios.

Dios puede suplirnos con medida rebosante todas las gracias, para que de todo y en todo tiempo tengamos suficiente de forma que podamos prosperar en todo lo que está bien. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario