Cambia tu manera de pensar

Todo depende del color del cristal con que se mira.
¿Nuestros problemas de dónde vienen?
¿Cuál es la raíz de nuestros problemas?

Romanos 1.25
Cambiaron la verdad acerca de Dios por una mentira. 
Y así rindieron culto y sirvieron a las cosas que Dios creó 
pero no al Creador mismo,
¡quien es digno de eterna alabanza! Amén.

La raíz de nuestros problemas viene del edén
Eva creyó a la serpiente
Fue engañada y decidió no hacer caso a la advertencia de Dios.
Adán decidiío seguir a Eva en vez de obedecer a Dios.
Ambos decidieron lo que era verdad.
Decidieron lo que era bueno.
Decidieron vivir independientemente de Dios.
Decidieron imponer su propia razón.
Decidieron ignorar la Palabra de Dios.

Las consecuencias de sus decisiones las recibimos todos nosotros.
Una mentira considerada como verdad 
afectará tu vida como si fuera verdad, 
aun cuando sea una mentira.

Ejemplo1
Si crees que el dinero te dará seguridad y felicidad
Resultará en adicción al trabajo
materialismo, avraricia, deshonestidad, etc.

Ejemplo 2
Si crees que para ser feliz debes estar casado
Resultará en infelicidad de ser soltero,
decepción con su pareja, divorcio si es infeliz.

Ejemplo 3
Soy como soy y no cambiaré
Resultará en sentientos de vergüenza
Culpabilidad, falta de esperanza, inferioridad
pasividad, falta de creatividad
Tú tratas de vivir al margen de Dios
Tratas de imponer tu propio criterio.

Proverbios 14.12
Hay camino que al hombre le parece derecho;
pero su fin es camino de muerte.
Tienes que resolver el siguiente problema:
la mentira que crees acerca de Dios
quién sos
en quién puedes confiar
lo que es bueno o malo
lo que valemos
cuál es tu propósito en la vida
cómo es Dios

Romanos 12.2 NTV
No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo,
más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas
al cambiarles la manera de pensar. 
Entonces aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes,
la cual es buena, agradable y perfecta

1. Reconocer las mentiras que creíste
2. Renunciar a ellas y rechazarlas
3. Reemplazarlas con la Verdad de Dios
4. Reformatear tus pensamientos 
para que reflejen tus nuevas creencias