domingo, 10 de enero de 2016

Caín, Balaam y Coré quieren quitar la pasión

Judas 1:10  Pero éstos blasfeman de cuantas cosas no 

conocen; y en las que por naturaleza conocen, se 

corrompen como animales irracionales. 

Critican todo lo que no entienden. 
Consideran sin valor e irrelevante cualquier cosa 

que esté fuera de su órbita y de su experiencia

se dejan contaminar por las únicas cosas que 

entienden:

sus instintos carnales, común con las bestias 

irracionales

su forma de vida consiste en dejar que esos 

instintos se salgan con la suya

su escala de valores es exclusivamente carnal

hombres que han perdido toda conciencia de las cosas 

espirituales, 

para ellos lo único que cuenta son los instintos 

animales

Jud 1:11  ¡Ay de ellos! porque han seguido el camino 

de Caín, y se lanzaron por lucro en el error de 

Balaam, y perecieron en la contradicción de Coré. 

Judas presenta tres ejemplos de hombres malos que 

dejaron de lado a Dios

En lugar de cuidar de su hermano, Caín lo mató (Gen 

4:8; 1 Juan 3:11-12). 

A Balaam se le ofreció dinero para maldecir a 

Israel. 

Después que Dios prohibió las maldiciones, Balaam 

condujo a Israel al pecado (Nm 22-24). 

Tras dirigir una rebelión contra Moisés y Aarón, 

Coré y sus seguidores fueron tragados por la tierra 

(Num_16:1-24).

Figura de odio, orgullo, envidia, rebeldía, 

homicidio, desconfianza y menosprecio a la voluntad 

de Dios

Buscan arrastrate a la inmoralidad (con lo cual te 

asesina espiritualmente). 

por dinero dejan que se practique la inmoraliodad

Error: se refiere a un andar desviado, un error. 

En el NT, el descarriado siempre lo sería con 

respecto a la moral y a la doctrina.

Caín es la universidad de la calle que enseña a 

entregarse a la inmoralidad y a toda maldad 


Balaam es el prototipo del codicioso, del blasfemo y 

del seductor

El delito de Coré es la rebelión contra Moisés y el 

sacerdocio de Aarón (Num_16:1-35).

Coré es la rebeldía pura

Coré y los suyos fueron aniquilados por el castigo 

de Dios

Si dejamos de practicar un juego, perdemos la 

capacidad de jugarlo

si te niegas insistentemente a escuchar a Dios

y sólo alimentas tus instintos 

esa será tu única dinámica de tu conducta

acabarás por no poder oír la voz de Dios

Terminarás sordo para Dios y ciego para la bondad

Lo que Dios nos dice no está en tus manos

no tenemos derecho a interpretarlo según nuestra 

voluntad 

ni a darle valor según nuestro arbitrio

Dios exige, para conducirnos a la libertad, que nos 

inclinemos ante sus palabras.

Toda desobediencia, aún disimulada, te aleja de él y 

te conduce a la perdición. 

Para Judas este timpo de gente ya está muerta 
: "perecieron"

En el v. 12: "dos veces muertos".

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